44. Flora y Fauna (9). Sapillo pintojo ibérico (Discoglossus galganoi) - (1).
El sapillo pintojo ibérico (Discoglossus galganoi) es un pequeño anuro perteneciente a la familia Alytidae. Es una especie muy discreta, cuya observación es difícil, por lo que no se conocen muchos detalles acerca de su biología. Su actividad es predominantemente nocturna, si bien en ocasiones pueden observarse ejemplares metamórficos durante el día. Fuera de su periodo de actividad, permanecen ocultos bajo piedras, enterrados en el barro o, lo más frecuente, escondidos entre la densa vegetación herbácea o las raíces de matorrales y árboles cercanos a los medios acuáticos donde habitan. Es un endemismo ibérico cuya distribución mundial comprende únicamente a Portugal y la mitad occidental de la España peninsular.
En Fuente Vieja, actualmente, habita en las zonas donde se acumula el agua, principalmente en el estanque y alrededores, en la represa construida durante las obras y el canal entre ésta y la cámara, así como a lo largo del cauce del agua que va desde el estanque hasta el alcantarillado y toda la zona del huerto urbano.
Las actuales circunstancias, ya acabadas las obras, permiten una comparación respecto de anteriores épocas y una aproximación especulativa de futuro sobre esta especie endémica:
1) Periodo en el que el lugar estaba habitado, con viviendas construidas a ambos lados de la vaguada del cabezo;
2) cuando el lugar quedó despoblado y abandonado por el derrumbamiento de las construcciones y
3) inicio de los trabajos del grupo Voluntariado de Patrimonio Histórico Fuente Vieja, 2012, 2013, hasta hoy.
1) En este periodo, aún desconociendo de forma directa la vida en la zona, parece evidente que no existía un medio natural amplio para el desarrollo de la vida de estos anfibios, aunque ello no impidiese la existencia de alguna zona de humedad donde hubieran subsistido algunos ejemplares. A ambos lados de la vaguada en torno a Fuente Vieja, cuya agua era aprovechaba para diferentes usos, había viviendas, y el movimiento de personas limitaba las condiciones de vida del sapillo pintojo.
2) Tras el derrumbe de las casas y el desescombrado, quedó un lugar deshabitado y abandonado, y poco a poco la vegetación se hizo dueña del entorno. Al correr el agua sin encauzar desde la cámara hasta el desagüe al alcantarillado, la humedad, la formación natural de charcos y la abundante vegetación, favorecieron las condiciones de vida de toda la fauna en general, y de los ejemplares de sapillo pintojo que allí hubiesen sobrevivido, en particular. La conexión directa entre el exterior y el interior de la cámara a través del hueco que se descubrió en su momento (hoy ventana con reja), sirvió para que el sapillo pudiese entrar y salir de dicha cámara. Posiblemente este periodo fue el mejor para el desarrollo vital de esta especie.
3) En el mes de octubre de 2012 se iniciaron los primeros trabajos con maquinaria pesada para facilitar el acceso a Fuente Vieja. El hecho de arrasar con gran parte de la vegetación existente y la irrupción y modificación del cauce del agua, incidió de forma negativa y traumática en la población de este anfibio (y otras especies terrestres y aéreas). Pasados unos pocos años, después del trabajo del grupo de Voluntariado (en el año 2015), hasta que se reiniciaron las labores de urbanización y puesta en valor de Fuente Vieja, la colonia del sapillo se vio revitalizada con puestas de huevos en varios puntos del entorno y a simple vista se podía visibilizar los grupos de renacuajos dispersados en diferentes charcas, así como ejemplares más adultos por toda la zona, incluida la del huerto urbano allí existente.